Hace siglos que no escribo en este blog, eso es evidente. Ha habido razones de peso para que eso sucediera, razones que quizás no merezca la pena ni nombrar por lo doloroso que puede resultar y porque no quiero estropear una entrada que pretendo que sea una continuación de lo que durante tanto tiempo fue "mi tabla de salvación": las labores, plasmadas en este blog y todas las amistades que he conseguido a través de este rincón. Amistades que ocupan un lugar muy importante en mi vida y en mi corazón, de eso no os quepa duda, y que han alimentado en mi la fe y la esperanza durante una etapa muy dura de mi vida.
Hace pocos meses comencé otra etapa, tan dura como la anterior, pero mucho más gratificante y llena de ilusión. Como no puede ser de otra manera no dejo de tricotar y de hacer labores, me es imposible.
Así que aquí sigo y seguiré, compartiendo con vosotras mi pasión.